Dormir con un implante coclear

Hay formas de ayudar a tu hijo a superar esta ansiedad. La base de un sueño reparador es una rutina. Estableciendo una serie de actividades que usted y su hijo realicen cada noche justo antes de acostarse, puede ayudarle a conciliar el sueño de forma cómoda y predecible.

Empezar despacio

Quedarse dormido generalmente no es un proceso instantáneo, así que es mejor trabajar hacia la hora de dormir gradualmente. En las horas previas a la hora de dormir de tu hijo, evita sobreestimularlo. Trata de no moverte demasiado y evita las sorpresas. Y si estás reproduciendo música o juegos, es mejor mantenerlos suaves y relajantes.

Desarrollar una rutina

Sé predecible y haz las mismas cosas cada noche, en el mismo orden y a la misma hora. Esto ayudará a tu hijo a reconocer que se acerca la hora de acostarse y sabrá lo que debe hacer para prepararse.

Aquí tienes un ejemplo de rutina:

1. Empieza con un baño y cepillando los dientes. Hazle saber que es la hora diciéndole: “Ahora es de noche, ¡así que eso significa la hora del baño!”. (No olvides volver a ponerle los procesadores de audio después del baño.) Repetir las mismas frases todos los días puede ser útil. También puedes escuchar una canción sobre el cepillado de dientes con acciones que acompañen a la letra.
   
2. Ponte el pijama. Puedes convertirlo en un juego preguntando a tu hijo qué quiere ponerse y haciéndole ir a buscar cada prenda de una en una. Así comprobarás que entiende tus preguntas y reconoce el nombre de cada prenda.
   
3. Mete a tu hijo en la cama. A continuación, cantad nanas o leed un libro juntos. Puedes hacer movimientos o expresiones faciales que acompañen la letra de la nana. Cuando leas un cuento, subraya las palabras importantes y señala los dibujos que correspondan a las palabras que estás leyendo en voz alta.
   

Quitar los procesadores de audio antes de dormir

Hay varias razones por las que los procesadores de audio deben quitarse a la hora de acostarse: para evitar que las pilas se agoten, para asegurarse de que su hijo no se los separe mientras duerme, para que la piel que rodea el implante descanse de la bobina y para evitar la incómoda sensación de dormir encima de un procesador. Pero puede que a su hijo le resulte difícil entender estas razones.

Niños más pequeños

Si le quita los procesadores de audio a su hijo pequeño cada vez que se va a dormir, hágaselo saber con antelación diciéndole algo como: “Ahora es el momento de estar tranquilos. Vamos a ponerte el pijama, leer un libro y luego te quitaremos los procesadores de audio de las orejas”.

Y cuando te los quites, puedes decir: “Ahora es el momento de quitarte los procesadores de audio de las orejas y ponerlos en su caja especial de secado”. Asegúrate de que tu hijo puede ver lo que estás haciendo. Coloca los procesadores de audio en un lugar seguro, por ejemplo, en la mesilla de noche dentro del kit de secado. Así empezarán a reconocer que los procesadores de audio están ahí y que seguirán estando por la mañana.

Niños mayores.

Si su hijo es un poco mayor y más independiente, pídale que se quite él mismo los procesadores de audio. A continuación, pueden colocar juntos el procesador de audio en el kit de secado de la mesilla de noche.

Tranquilice tanto a los niños mayores como a los más pequeños diciéndoles que podrán oír una vez que vuelvan a ponerse los procesadores: puede decirles que el sonido se apaga sólo mientras duermen y que estará ahí por la mañana, cuando vuelvan a encenderse los procesadores de audio.

Ofrecer comodidad

Siempre que el procesador de audio de tu hijo esté apagado, puedes equilibrar su ansiedad ofreciéndole el mayor confort posible. Su hijo puede irse a dormir abrazado a una manta especial, un peluche o un juguete blando y saber que se despertará con él por la mañana. Asentir con la cabeza, sonreír o hacer un gesto como levantar el pulgar para indicarle que está bien también puede ser útil. Estos gestos son reconfortantes y su hijo puede verlos y entenderlos incluso sin oírlos.

Dormir mejor para oír mejor

Dormir bien es la clave para oír bien al día siguiente. Y hacer que el día sea menos estresante con un horario estructurado puede hacer que irse a la cama sea más fácil. Echa un vistazo a estos consejos crear una rutina que pueda ayudar a su hijo a lo largo del día.

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